Pitusa lleva años con nosotros, la encontramos en la calle con el rabito completamente amputado y en carne viva, no sabemos que le pudo pasar pero estaba aterrada. Al principio le costó un poco acostumbrarse a vivir sin rabo, como sabéis es una prolongación de la columna vertebral y les ayuda a equilibrarse. Tenia muchísimo miedo y le costó acoplarse a convivir con personas. Ahora Pitusa es feliz, sigue asustandose con los cambios pero convive con más perros y gatos y lleva una vida completamente normal. Aunque está en una casa de acogida de 10 donde la quieren un monton la adopión de Pitusa dejaría un hueco libre en esa casa para poder rescatar a otro animal de la calle, un animal que lo esté pasando tan mal como lo pasó ella hace años, además merece un hogar definitivo cuanto antes. Es una gatita muy tranquila, sumisa y cariñosa ESTERILIZADA. Nacimiento: 06/2014
5 fotos
|
1 foto
|