Esta es Luna. Es una perrita que mi madre se encontró abandonada (hecho por el que no podemos saber la fecha exacta de su nacimiento) en un estado casi lamentable: tenía muchos bichos y le habían arrancado el microchip, lo peor de todo es que le cortaron el rabo de mala manera quedándole del tamaño de un dedo pulgar humano.
La íbamos a dar en adopción, pero dicidímos quedárnosla.
Quiero mucho a mi negrita.
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